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La crucifixión de Jesús

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Aileen: Bienvenidas a Mujer para la gloria de Dios, quien les habla Aileen Pagan de Salcedo, y Cathy Scheraldi de Núñez y Mayra Beltrán de Ortiz

MPLGDD es una producción del Ministerio de mujeres Ezer, de la IBI, bajo la sombrilla del Ministerio de Integridad & Sabiduría. 

Continuamos hoy con una nueva entrega de nuestra serie sobre Jesús una vida única, titulada “La crucifixión de Jesús”.

Cathy: Gracias a Dios por todas las oyentes que nos apoyan con su sintonía y mensajes. En verdad es una bendición poder compartir con ustedes. Y es por esto que queremos invitarlas a compartir con nosotras a través de preguntas reflexivas que estamos posteando en Instagram, para que puedan sacar mayor provecho personal al contenido de MPLGDD. ¡No dejen de responderlas! 

Hoy, la pregunta que nos hacemos para mayor reflexión en nuestras vidas a la luz del programa que compartiremos es: Conscientes del alto estándar de santidad de Dios ¿somos capaces de pagar el precio como Jesús lo hizo en la cruz?

Y como siempre antes de iniciar con nuestro estudio, vamos a presentarnos a nuestro Señor, oremos.

Mayra: ¡La semana pasada estudiamos el último de los 6 juicios falsos de Jesús y vimos como Pilato quedó envuelto en sus manipulaciones porque no tuvo el temple para hacer lo correcto desde el principio! Hoy queremos centrarnos en la crucifixión de Jesús. Como vimos la semana pasada, Pilato subestimó el odio de los religiosos hacia Jesús.  ¡¡¡A tal punto de que cuando Pilatos les ofreció liberar a un prisionero, estos prefirieron y liberar a un conocido criminal que liberar a Jesús!!! 

Aileen: Los religiosos lograron intimidar a Pilato para asegurarse del resultado, por eso le gritaron, “Si sueltas a éste, no eres amigo del César; todo el que se hace rey se opone al César”. (Juan 19:12) Aunque Pilato reconoció no encontrar ningún delito en Jesús, lo entregó para crucificarlo. Entonces sacaron a Jesús cargando su propia cruz en camino hacia el Gólgota, junto a otros 2 prisioneros, cada uno a un lado de Jesús. 

Es interesante pensar que cada uno de los grupos de personas involucrado en todo este acontecimiento, no quisieron a Jesús como rey, pero por razones diferentes. 

Cathy: Para los religiosos, Jesús no fue el Mesías que les liberaría de los romanos. Para los poderosos romanos, Jesús no fue una persona que ellos pudieran controlar. Y para Pilato, Jesús no fue el revolucionario que legítimamente pudiera condenar. Sin embargo, todos tenían algo en común, ¡y es que querían deshacerse de Jesús para resolver su problema! 

Aunque los romanos utilizaban esta forma de tortura para matar a los delincuentes, esta práctica de la crucifixión fue inventada por los persas. Los romanos la utilizaron con los peores criminales, porque entendían que era la mejor forma de mantener el orden. 

Mayra: Hay 4 características que hacían de la crucifixión, la mejor forma de ejecutar a alguien. Primero, porque infligía una agonía implacable, segundo, causaba una muerte prolongada, convirtiéndose en un espectáculo público, y produciendo mayor humillación al prisionero. 

Y al pensar en esto es que entiendo por qué Calvino dijo que nosotros sufrimos de depravación total. ¡No hay ni vestigios de compasión en los corazones de quienes inventaron esto! 

Y aunque los romanos no inventaron la crucifixión, si la perfeccionaron. Había un conductor de la muerte que se llamaba “exactor mortis” que en latín significa entrenado en el proceso de matar. Este lideraba a un equipo de soldados llamado “quaternion”. 

Aileen: El objetivo exclusivo de este equipo era hacer esta tarea lo más agonizante posible para los prisioneros, por eso experimentaron diferentes métodos maquiavélicos. El historiador Josefo escribió que estos experimentaron clavando las victimas en diferentes posiciones, ya sea por rabia, odio, o hasta por sadismo. Para obtener el nivel máximo de tortura, pero que a la vez murieran cuando ellos así lo quisieran. La víctima era azotada primeramente en preparación para la ejecución, y la duración dependía del grado de la flagelación. Si el verdugo quería que la víctima muriera rápidamente, la flagelación era con pedacitos de huesos de animales en los extremos del látigo.  Pero si querían extender la tortura, los primeros azotes eran solamente con tiras de cuero.

Cathy: Y así el prisionero podía durar varios días, hasta más de 1 semana. ¿Estamos captando la gravedad de esta práctica? ¡Increíblemente, los quaternion desarrollaron una ciencia de cómo causar el mayor dolor posible! 

Siguiendo con el proceso que antecedía a la crucifixión, después de la flagelación, el prisionero era despojado de su ropa y dejado desnudo. Y le obligaban a cargar la misma cruz donde seria colgado, hasta el lugar de la ejecución. Normalmente al prisionero le colocaban alrededor del cuello un tablero donde escribían el nombre y la lista de sus crímenes. Eventualmente este mismo tablero era colocado en la cruz, por encima de la cabeza de la víctima para que todos pudieran verlo mientras moría.  

Mayra: Mientras el prisionero caminaba a través de la ciudad hasta llegar al lugar de su muerte, el “quaternio” caminaba junto a él escoltándole. Esta especie de procesión se llamaba la vía dolorosa y el propósito era humillar al prisionero al máximo, mientras también servía como advertencia al resto del pueblo, de cuál sería su destino si desobedecían a las autoridades. 

Sabemos que el azote que Jesús recibió fue bastante severo porque no fue capaz de cargar la cruz hacia el Gólgota, y obligaron a Simón de Cirene a llevársela. 

Justo antes de caminar por la ciudad, desnudaron a Jesús, le pusieron encima un manto de escarlata, una corona de espinas en su cabeza, y una caña en su mano derecha. Luego arrodillándose delante de Él, le hacían burla, diciendo: ¡Salve, Rey de los judíos!

Aileen: Y escupiéndole, tomaban la caña y le golpeaban en la cabeza. Y después de haberse burlado de Jesús, le quitaron el manto, ¡le pusieron sus ropas y le llevaron para crucificarle! 

Me llama mucho la atención el odio de estos hombres porque Jesús no era una amenaza para el estado romano, ni un prisionero prófugo o alguien que hubiera causado mucho daño, sino alguien a quien los judíos trajeron donde ellos. ¡Esto fue por pura maldad, lo que nos demuestra lo que somos capaces de hacer! 

Y los judíos, después de ver todo esto, el único reclamo que hicieron fue que el tablero decía que Jesús era el rey de los judíos. Y quisieron cambiarlo para evitar confusión, porque para ellos era simplemente Jesús el nazareno. Sin embargo, Pilato se rehusó!

Cathy: ¡Aun esto me llama la atención porque después de todo la burla, insultos y tortura de la cual Jesús fue objeto, parecería que los lideres religiosos todavía veían a Jesús como una amenaza! Y pudiéramos preguntarnos ¿qué estaba ocurriendo en sus mentes y corazones? ¿Acaso vieron algo en la respuesta de Cristo que tocó las fibras de sus corazones? O ¿fue el impromptu del Espíritu Santo que ellos querían ignorar? Siendo coherentes con su argumento de que Jesús era un simple hombre, y ya estando este tan débil y a punto de morir, ¿por qué tener miedo de que algunos pudieran pensar que Jesús era rey? ¿Qué puede hacer un rey muerto?, a menos de que en sus consciencias estos supieran que este no era un simple hombre…

Mayra: ¡Por eso yo también creo que era un impromptu del Espíritu Santo, dándoles una última oportunidad para arrepentirse! 

Volviendo a los hechos alrededor de la cruz, el prisionero solamente debía cargar la parte horizontal porque la parte vertical estaba esperándole en el área del Gólgota. Aun así, este madero pesaba alrededor de 250 libras, el camino seguramente era estrecho porque estaba lleno de personas, porque esto sucedió en el tiempo de la Pascua, cuando todo el mundo venía a Jerusalén para sacrificar su cordero por el perdón de sus pecados. Al llegar al Gólgota, se unían los maderos y el prisionero a ser crucificado era colocado por encima del madero. 

Aileen: En la mayoría de los casos, el prisionero era atado al madero, a menos de que quisieran que este muriera más rápido, entonces lo clavaban, lo cual era el caso con Jesús porque estaban en los días de fiesta y querían terminar con esto rápidamente. 

En esta posición, para respirar, el prisionero necesitaba empujarse sobre sus piernas para inhalar, haciéndole mover la espalda que estaba ya lacerada por el azote, y causando un dolor insoportable. Por esto usualmente la respiración era mínima, disminuyendo así el oxígeno en la sangre y acumulando dióxido de carbono, lo que le causaba confusión y eventualmente un coma. 

Cathy: En las fotos que vemos de Cristo, siempre enseña como si el clavo le hubiera pasado por la palma de las manos, pero la realidad es que no fue ahí donde lo clavaron. La mano no soporta el peso del cuerpo, y de hacerlo así se rasgaría la mano. Por eso el clavo pasaba por la muñeca. 

Y Ustedes, ¿pueden preguntarse por qué este detalle es importante? 

Es importante porque el nervio que pasa por la muñeca, al ser clavado, causaba un dolor tan insoportable que la muerte del crucificado al final se debía a que este no quería moverse. Entonces dada la falta de oxígeno combinado con la pérdida de sangre por el azote, hacían al prisionero cada vez más débil y poco a poco se asfixiaba.   

Mayra: Imagínense lo que Cristo sintió cuando le levantaron clavado a la cruz, y el madero cayó en el agujero en la tierra con un movimiento brusco. Y ¿cuál fue la reacción de Jesús? “Padre, perdónalos, porque no saben lo que hacen” (Luc. 23:34) ¡Mientras los malhechores que acababan de torturarlo estaban repartiéndose entre sí sus vestidos, Cristo estaba orando por ellos, ¡pidiendo al Padre que perdonase a aquellos que tenían por profesión el torturar a las criaturas que Dios mismo creó! ¡Definitivamente esta no sería mi reacción!  

Cathy: Al contrario, hasta vergüenza me da, ¡el admitir cuál sería mi reacción!

Mayra: Para este momento eran alrededor de la 9 en la mañana, Jesús no había dormido en toda la noche, y estaba colgado en una cruz entre dos criminales. 

Aileen: “Y los que pasaban le injuriaban, meneando la cabeza y diciendo: ¡Bah! Tú que destruyes el templo y en tres días lo reedificas, ¡sálvate a ti mismo descendiendo de la cruz!

De igual manera, también los principales sacerdotes junto con los escribas, burlándose de Él entre ellos, decían: A otros salvó, a sí mismo no puede salvarse. Que este Cristo, el Rey de Israel, descienda ahora de la cruz, para que veamos y creamos. Y los que estaban crucificados con Él también le insultaban”. (Marcos 15:29-32) Y los 2 ladrones en la cruz también lo insultaba, sin embargo, algo ocurrió en uno de ellos.

Cathy: Escuchemos lo que está escrito en Lucas 23:39-42 “Y uno de los malhechores que estaban colgados allí le lanzaba insultos, diciendo: ¿No eres tú el Cristo? ¡Sálvate a ti mismo y a nosotros! Pero el otro le contestó, y reprendiéndole, dijo: ¿Ni siquiera temes tú a Dios a pesar de que estás bajo la misma condena? Y nosotros a la verdad, justamente, porque recibimos lo que merecemos por nuestros hechos; pero éste nada malo ha hecho. Y decía: Jesús, acuérdate de mí cuando vengas en tu reino”.

Y vemos la respuesta de Jesús en el versículo 43 “En verdad te digo: hoy estarás conmigo en el paraíso”. ¿Qué ocurrió aquí?

Mayra: Este es uno de los ejemplos más contundente que sustentan que la salvación es por elección. Y para explicar esto mejor, se ha identificado que hay un comportamiento grupal bien descrito en psicología, y son las actividades o conductas de un grupo de personas que se congregan temporalmente, mientras su atención está enfocada en el mismo evento u objeto. La psicología de las masas nos enseña que la mayoría de las personas tendemos a creer y hacer lo que la gente que nos rodea cree y hace, aunque al mismo tiempo afirmemos que nuestras ideas y hábitos se eligen libremente. 

Este ladrón no tenía ninguna razón para creer en Jesús, porque no hubo tiempo para que este se enfocara en conocer a Jesús. Algo sobrenatural ocurrió y es que el Espíritu Santo lo regeneró y pudo ver la verdad.

Aileen: También esta es una evidencia contundente de que la salvación es un regalo de Dios como Efes 1:5-9 “nos predestinó para adopción como hijos para sí mediante Jesucristo, conforme al beneplácito de su voluntad, para alabanza de la gloria de su gracia que gratuitamente ha impartido sobre nosotros en el Amado. En El tenemos redención mediante su sangre, el perdón de nuestros pecados según las riquezas de su gracia que ha hecho abundar para con nosotros. En toda sabiduría y discernimiento nos dio a conocer el misterio de su voluntad, según el beneplácito que se propuso en Él”

Cathy: Desafortunadamente el tiempo se nos agotó, sin embargo, podemos continuar a lo largo de la semana orando y meditando sobre lo que Cristo hizo por todos los que le aceptan como Señor y Salvador!

Ya saben no dejen de sintonizarnos en nuestro próximo programa con esta serie sobre la vida de Jesús. 

Mayra: Queridas hermanas, queremos recordarles que necesitamos de sus oraciones por el programa Mujer Para la Gloria de Dios. La

oración es una necesidad real porque necesitamos ¡Su protección! 

Aileen: Ya saben que pueden seguirnos en twitter e Instagram escribiendo a @MPLGDD y en Facebook Mujer para la gloria de Dios. Les esperamos en nuestro próximo encuentro.