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El inicio de la lucha entre el hombre y la mujer

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Aileen: Bienvenidas sean todas a nuestro espacio de Mujer para la gloria de Dios.  Les saludan quien les habla Aileen Pagan de Salcedo, Cathy Scheraldi de Núñez y Mayra Beltrán de Ortiz (palabras de saludos).

MPLGDD es una producción del Ministerio de mujeres Ezer, de la IBI, bajo la sombrilla del Ministerio de Integridad & Sabiduría.

Cathy: Hoy compartimos el 2do podcast de esta nueva serie “Las garras del feminismo”. El podcast de hoy lo hemos titulado “El inicio de la lucha hombre versus mujer”. 

Y para iniciar, vamos a orar, Mayra tú puedes orar… 

Aileen: La semana pasada comenzamos con esta nueva serie con una de las mentiras que las feministas promueven, el etiquetar al cristianismo como machista, ¡porque trata a las mujeres como ciudadanas de segunda clase! 

Hoy queremos ir a Génesis capítulos del 1 al 3, y comenzar a revisar la concepción de Dios al momento de crear a la mujer. Y desde del origen tumbar esta mentira feminista de que las mujeres somos ciudadanas de 2da clase! Leamos en Génesis 1:27 que dice “Creó, pues, Dios al hombre (hadam) a imagen suya, a imagen de Dios lo creó; varón (zakhar) y hembra los creó”.

Mayra: Todo esto en el original fue escrito en hebreo, lo que estamos leyendo hoy es la traducción al español. Y en las traducciones siempre hay diferencias entre las palabras porque estas tienen diferentes matices en cada lengua. Muchas veces no hay un término exacto que traduzca de un idioma a otro el significado completo de una palabra, y es necesario utilizar varias palabras.

Para dar un ejemplo, aunque no está relacionado con este pasaje, tenemos la palabra amor.  En el antiguo griego existían 4 palabras diferentes para referirse al termino de amor.

Cathy: En griego existe la palabra storge que se refiere al amor familiar, la palabra filos que es el amor entre amigos, la palabra eros que es el amor romántico o pasional, y la palabra ágape que es el amor incondicional de Dios. 

Mientras tanto, en español y en ingles que es mi lengua materna, ¡solamente hay una palabra para referirse a amor! 

Por eso es que cuando estudiamos la Biblia es importante buscar el significado de las palabras puntuales en la lengua original, para así entender mejor lo que el texto está diciendo. 

¿Y algunos se preguntarán si es que acaso este podcast es una clase de introducción a la exegesis? muy buena pregunta… 

Aileen: Y en verdad la razón es que, a través de la exegesis, es que podemos extraer el significado más completo de un texto.

Exactamente lo que queremos hacer para entender bien lo que Dios nos enseña en Génesis sobre la mujer. Dios dijo “Creó, pues, Dios al hombre a imagen suya, a imagen de Dios lo creó;” La palabra utilizada para hombre es “hadam” y significa seres humanos y no hombres masculinos solamente. En el resto del versículo si especifica luego varón y hembra los creó.”  Porque la palabra en el original para varón es “zakhar” y significa hombre masculino. ¿Notan que fácil es malinterpretar un pasaje? 

Mayra: Claro! 

¡Algunas pudieran excusarse de que no hablan hebreo o griego, y la verdad es que nosotras tampoco! Sin embargo, hoy tenemos muchos recursos que nos pueden ayudar con esto. Por ejemplo, a través de Google podemos accesar a una Biblia en línea en hebreo-español, con transliteración, que nos da la palabra que  buscamos con un enlace que nos refiere a  comentario de Strong, y luego a a una página que explica el significado de la palabra. 

Ahora si, vamos a leer el mismo versículo con el significado de las palabras en hebreo.

Cathy: “Creó, pues, Dios a los seres humanos a imagen suya, a imagen de Dios los creó; hombre y mujer los creó”. Al leerlo así es obvio que tanto el hombre como la mujer fueron creados a la imagen de Dios, con igual valor.  ¡Y ambos llamados a ser sumisos a Dios! 

Y a propósito, muchas mujeres odian esta palabra sumisión, porque de nuevo ha sido malinterpretada. ¡Este es todo un tema que trataremos en un futuro, pero no ahora!

Aileen: Basta decir que el significado de sumisión no implica que sea un rol inferior al líder, sino que es más bien una actitud por la cual todos debemos vivir, así como Jesús se sometió al Padre. 

¿Recuerdan cuál es la meta de Satanás?

Mayra: ¡Claro! Leemos en la primera parte de Juan 10:10 “El ladrón solo viene para robar y matar y destruir;” Y en la segunda parte de este mismo versículo Jesús nos dice “yo he venido para que tengan vida, y para que la tengan en abundancia.”

Aileen: Precisamente, Dios creó un mundo bueno en gran manera y si nunca hubiésemos pecado, ¡seguiríamos viviendo en aquel paraíso!  Sin embargo, todos nosotros pecamos, no solamente Adán y Eva. La maldad entró en el paraíso y desde entonces la vida se ha convertido en un arduo trabajo. Y sabemos el por qué, ¿quién es el que dirige el mundo?

Mayra: Jesús nos dijo en Juan 12:31 justo antes de ser juzgado y crucificado “Ya está aquí el juicio de este mundo; ahora el príncipe de este mundo será echado fuera.” Satanás es el príncipe, pero no el rey. Jesucristo es el rey, y Él despojó a Satanás de todos sus poderes en la cruz!

Cathy: Si leemos en Colosenses 2:15 “Y habiendo despojado a los poderes y autoridades, hizo de ellos un espectáculo público, triunfando sobre ellos por medio de Él”.

Mayra: ¿Entonces por qué es que el mundo sigue tan mal?

Cathy: Porque “el dios de este mundo ha segado el entendimiento de los incrédulos, para que no vean el resplandor del evangelio de la gloria de Cristo, que es la imagen de Dios”. (2 Corintios 4:4) 

Aileen: ¡El mundo vive en una batalla espiritual que ni se dan cuenta que están peleando! ¡Por eso el feminismo ha permeado tanto la mente de la sociedad actual! Pablo nos dice en Efesios 6:12 “nuestra lucha no es contra sangre y carne, sino contra principados, contra potestades, contra los poderes de este mundo de tinieblas, contra las huestes espirituales de maldad en las regiones celestiales”.

Y con respecto al tema del feminismo, debemos estar claras en que nuestra lucha NO es contra las personas que promueven la agenda feminista.

Mayra: No, la lucha es entre Satanás y Dios y nosotros solamente estamos siendo afectadas por la batalla. Ahora, regresando a Génesis 3, en donde inicio esta lucha, vemos que Dios le dijo a Adán, “maldita será la tierra por tu causa;” Y Dios dijo a la serpiente “pondré enemistad entre tú y la mujer, y entre tu simiente y su simiente;” Entonces la batalla fue seteada y los soldados de cada lado fueron identificados.

Cathy: Algo más que podemos aprender de Génesis 3, es que Dios dijo “la mujer: En gran manera multiplicaré tu dolor en el parto, con dolor darás a luz los hijos; y con todo, tu deseo será para tu marido, y él tendrá dominio sobre ti”. De nuevo, para entender bien lo que esto significa necesitamos buscar la palabra original utilizada para referirse al “deseo” que la mujer sintiera por su esposo. Y la palabra es teshuqah (teshuvá), que también es utilizada en Génesis 4:7 cuando Dios dijo a Caín “Si haces bien, ¿no serás aceptado? Y si no haces bien, el pecado yace a la puerta y te codicia, pero tú debes dominarlo”. (teshuqah)

Aileen: ¡Es decir que el deseo de la mujer es el de dominar a los hombres, o sea…controlarlos! 

¡Y quiero que entendamos que más que una batalla de sexos, esto es una batalla espiritual! Volviendo a la escena del jardín del Eden, aparte de Dios, de Adán y Eva ¿quién más estaba presente con ellos?

Mayra: La serpiente que era el animal más astuto de los animales que el SEÑOR Dios creo. Satanás astutamente ingenió su plan de ataque, originando un enfrentamiento entre ambos sexos. ¡Desde este momento la mujer quiere dominar al hombre, pero esto es contrario a la voluntad de Dios!

Aileen: ¿Qué ha producido esta batalla en el tiempo? mucho dolor, resentimiento, ira, celos, y una guerra constante entre ambos sexos. 

El conocer más sobre el origen de esta lucha, nos ayuda a entender mejor el por qué el movimiento feminista ha ganado tanta preponderancia. Sobre todo, cuando en verdad en muchas culturas, el hombre a distorsionado su autoridad, ¡en perjuicio de las mujeres! 

Cathy: Es fácil entender el por qué el feminismo promueve a los hombres como los opresores, y a las mujeres como las oprimidas.  ¡En principio una lucha que parece buena, porque se trata de promover un trato justo y respetuoso para la mujer! 

¡El problema es que el feminismo se ha venido desvirtuando y hoy las feministas atropellan la masculinidad y reclaman puntos que van más allá, abiertamente opuestos al cristianismo! 

Mayra: ¿Qué pasa cuando no luchamos alineados con el diseño de Dios?

Cathy: Es imposible ganar la batalla. Estamos claros en que Dios no les ha dado licencia a los hombres para abusar de las mujeres.  Sin embargo, el orden que Dios ha establecido es que los hombres sean los lideres de sus mujeres, de sus familias, y de la sociedad en general.

Aileen: O sea, estamos claros que la situación se ha complicado porque tanto mujeres como hombres han pecado en contra del diseño bíblico. Y no tenemos suficiente tiempo hoy para entrar en más detalles, sin embargo, en el próximo podcast abundaremos sobre esto. Nos parece más importante que hoy terminemos compartiendo unas pinceladas sobre el espinoso tema de la sumisión…

Mayra: Primero, el llamado a la sumisión es dado a todos los cristianos, no solamente a las mujeres sino a los hombres también. Y no solamente se trata de mostrar una conducta sumisa, sino que es más bien una actitud basada en el principio de Filipenses 2:3-4 “Nada hagáis por egoísmo o por vanagloria, sino que con actitud humilde cada uno de vosotros considere al otro como más importante que a sí mismo, no buscando cada uno sus propios intereses, sino más bien los intereses de los demás”.  ¡¡Es la disposición de tratar siempre al prójimo con gracia, testificando de mi obediencia y amor al Señor!! 

Cathy: ¡Somos embajadoras de Cristo! De hecho, la sumisión no comienza con someterse al liderazgo masculino, sino que comienza con el reconocimiento y la sumisión al reinado soberano de Dios.  Es el reconocimiento de nuestro amor por Aquel que nos amó primero. Y cuando los hombres y las mujeres se dan cuenta de que cada uno con sus diferentes dones, habilidades y llamados puede trabajar en equipo como iguales, entonces se les hace más fácil alcanzar grandes logros y experimentar mayor gozo en lo que el Señor le está llamando a hacer.

Aileen:  Ya sí que necesitamos cerrar el programa de hoy.  Y lo hacemos enfatizando que la sumisión es primeramente un acto de amor a Cristo, es confiar en su soberanía en nuestra vida y en las vidas de aquellos a nuestro alrededor.  ¡Mediten en esto con respecto a sus vidas!

Mayra: En el próximo podcast continuamos con esta serie “Las garras del feminismo”.

Recuerden orar por MPGD y seguirnos en las diferentes plataformas.  Les esperamos en nuestro próximo encuentro, en MPGD!