Tesis basada en Juan 3. Una de las prácticas de la iglesia que me ha preocupado por muchos años y ahora por igual, es ver la forma tan trivial en que la salvación es presentada. Para muchos, la salvación básicamente se adquiere un día en donde una persona levanta su mano, se para, pasa al frente y hace una profesión de fe, sin que ese procedimiento necesariamente implique un obrar del Espíritu Santo.