El domingo 29 de enero ha predicado en la IBI el pastor CJ Mahaney, quien vino ese fin de semana a impartir la conferencia Encuentros íntimos con Jesús. Trajo un mensaje basado en el capítulo 9 del evangelio de Marcos, versículos del 1 al 13, que narra acerca de la transfiguración de Cristo Jesús.
John Piper describió en una sola oración el por qué buscamos la Biblia. El dice que buscamos la Biblia para ser sorprendidos, y la narración de Marcos acerca de la transfiguración de Jesús es lo que logra realmente este evangelista, nos sorprende con esta narración de un evento realmente asombroso.
En estos versículos se narra una predicción de la proximidad inmediata del reino de Cristo. Este vistazo se dio en la transfiguración de Cristo. Dios reconoce a Jesús y lo acepta como su amado Hijo, y está dispuesto a aceptarnos con Él. Por tanto, hemos de reconocerle y aceptarle como nuestro amado Salvador, y debemos rendirnos para que Él nos dirija. Cristo no deja el alma cuando el gozo y los consuelos la dejan. Jesús le explica a los discípulos la profecía sobre Elías. Esto se prestaba para mal entender a Juan el Bautista.
Es importante la referencia que hace Marcos al tiempo en el inicio de la narración, es muy específico al mencionar 6 días después. Parece querer decir que en Jesús tenemos un nuevo Moisés, ya que es la primera vez que Marcos menciona estos seis días. Es una especie de anuncio. Igualmente menciona que van a un monte alto, lo que hacía referencia que en los montes altos eran los lugares de revelación, tal Como sucedía in la época de Moisés.
En la transfiguración Jesús no está reflejando la gloria de Dios como sucedió con Moisés. Esta era Su propia gloria. En medio de esta transfiguración, con la presencia de Moisés y Elías, Pedro dice que es bueno estar ahí y propone la construcción de tres enramadas. Pero un evento muy rápido, inmediatamente sucedió la presencia de Dios en una nube, sólo vieron a Jesús y los otros habían desaparecido, y la gloria de Jesús fue nuevamente escondida, la cual sólo puede volver a verse después de su muerte y resurrección. Porque el transfigurado debe sufrir y ser muerto para servir.
La transfiguración es una evidencia del cuidado de Jesús por nosotros. Moisés y Elías hablaban con Jesús sobre su muerte sobre la cruz. Y luego Jesús queda solo porque Él tiene que sufrir y morir. Este es el cuidado de Jesús por nosotros al morir por la culpa de nuestros pecados. La transfiguración nos asegura su amor y cuidado. Pudo haber escapado, pero se quedó para sufrir y morir por nosotros, lo que nos asegura su amor. Asumió nuestra culpa para que pudiéramos restaurar nuestra relación con el Padre.
Padre celestial, fortalece nuestra fe. Gracias por Tu amor hacia nosotros, gracias por Tu sacrificio y bondad para restaurar nuestra relación con Dios.
