Jesús, mirándolos, les dijo: «Para los hombres eso es imposible, pero para Dios todo es posible». (Mateo 19:26)
El contexto de este versículo se refiere a que los discípulos de Jesús estaban asombrados en gran manera ante la declaración de Jesús, en Mateo 19:23-24 “… «En verdad les digo que es difícil que un rico entre en el reino de los cielos. Otra vez les digo que es más fácil para un camello pasar por el ojo de una aguja, que para un rico entrar en el reino de Dios».
Como judíos que vivían bajo la ley de Moisés, por la que Dios prometía prosperidad a los que le obedecían, estos consideraban, y con razón, las riquezas como sinónimo de bendición de parte de Dios. ¿Entonces cómo es que no podían ser salvos?
Fue cuando el Señor contestó: Para los hombres esto es imposible; más para Dios todo es posible. ( V.26RVR1960)
Humanamente hablando, es imposible salvarse por sí mismo, solo Dios puede salvar un alma. Para una persona que posee muchas riquezas el camino a la salvación por fe le resulta cuesta arriba, y esto se debe, en la mayoría de los casos, a que ponen su confianza en los bienes que posee. Debemos estar claro, que igualmente, para muchos que no tienen riquezas o posesiones igual les resulta difícil confiar en algún medio que no sean visibles o tangibles.
Vale comentar, que no entendemos como es que muchos predicadores o comentaristas sermonean que es correcto que ¿“todo cristiano debe ser rico”? cuando el Señor denuncia en estos versos que las riquezas son un obstáculo para que las personas crean en el evangelio de salvación. Al comparar al rico con un camello, que no es mas que una bestia de carga, el Señor nos da a entender que no hay nada más pesado para el corazón humano que la sobreabundancia de bienes materiales.
El Señor nos insta en Mateo 6:33 “Pero busquen primero Su reino y Su justicia, y todas estas cosas les serán añadidas”
Es posible que alguna hermana cristiana, con abundantes posesiones, este leyendo este articulo y se pregunte, ¿Pero y como es esto posible? No se mortifique, porque los discípulos también se sintieron sobrecogidos.
Esta enseñanza era muy sorprendente, por eso los discípulos se quedaron atónitos, y preguntaban ¿y quién podrá salvarse? Pero, la infinita bondad de Dios nos ayuda, ya sea alguien con muchas posesiones o algunos sin ninguna posesión, pero con anhelo de su corazón de poseer muchos bienes, Dios en Su amor inclina el corazón para que pongan sus ojos en el Cristo salvador, es como dice el Proverbio 16:9 El corazón del hombre piensa su camino; Mas Jehová endereza sus pasos
Cuando el Señor habla de que es posible (griego dunato o “dinamo” sígnica: fuerte, potente, poderoso, (Strong #1415). La idea inherente es que tiene la habilidad para actuar y el poder para cumplir. Jesucristo asegura que a pesar de nuestros inútiles esfuerzos para hacer que las cosas sucedan, El puede demostrar el poder dinámico que traslada a la gente del reino de Satanás al reino de Dios.
El Señor nos insta a obedecer Su Palabra, la cual nos ha dejado para que sea nuestro manual de vida y conducta, a nosotras nos toca aprender a creer para obedecer, además tenemos un Ayudador, el Espíritu Santo, quien nos guía a la Verdad.
¿Qué debemos hacer? orar al Señor para que nos de conocimiento, discernimiento y nos ayude a escoger lo mejor que es Su Palabra. Y cuando nuestro corazón sienta inquietud, buscar el consuelo en la Palabra de Dios y es muy seguro que allí hallaremos deleite para nuestras almas. (Paráfrasis Salmo 94:19)
Leamos, escuchemos, meditemos cada día la Palabra de Dios. Recuerda que “…así que la fe viene del oír, y el oír, por la Palabra de Dios.”
Dios les bendiga