“Por tanto, tened cuidado cómo andáis;
no como insensatos, sino como sabios,
aprovechando bien el tiempo,
porque los días son malos.”
Efesios 5:5-6
Uno de los grandes problemas que enfrentamos en nuestros lugares de trabajo es la perdida de tiempo, solemos entretenernos en cosas que nos roban el tiempo de trabajar, por ejemplo, el uso de las redes sociales, llamadas, conversaciones con compañeros, el uso del internet, Etc.
Si deseamos aumentar nuestro rendimiento y ser mas productivas, lo mejor es que iniciemos haciendo algunos cambios que nos ayudarán a tener un uso efectivo del tiempo en nuestros trabajos.
Recordemos lo que nos dice Dios en Su Palabra en 1 Corintios 10:31 “Ya sea que comáis, que bebáis, o que hagáis cualquier otra cosa, hacedlo todo para la gloria de Dios”.
Así pues, es necesario que sepamos que, si estamos en ese lugar de trabajo, es porque Dios así lo permite, por lo tanto, Él espera que cumplamos con nuestras funciones para Su gloria.
Tomar la decisión de usar efectivamente nuestro tiempo en el trabajo, no es tarea fácil necesitamos llevar a cabo lo siguiente:
Depender 100% de Dios para lograrlo, Proverbios 3:5-6 nos dice, “Confía en el Señor con todo tu corazón, y no te apoyes en tu propio entendimiento. Reconócele en todos tus caminos, y Él enderezará tus sendas”. Sin Dios nada podemos hacer, orar a Él y confiarle sobre lo que deseamos lograr es lo mejor.
Administrar bien los talentos que Dios te ha dado, en la parábola de los talentos en Mateo 25:14-30 Jesús nos enseña que, si administramos bien nuestra mayordomía, se nos darán mas responsabilidades, pero si no administramos bien entonces se nos quitará la mayordomía. Dios nos juzgará de acuerdo con nuestras obras en referencia a nuestros talentos, Él nos ha regalado habilidades, esto nos hace crecer en nuestros puestos de trabajo, por lo que debemos ser buenas administradoras.
Ser integra y confiable, darle tu tiempo de trabajo a otras cosas que no debes, no es ser integra, dejar pasar el tiempo sin hacer tus responsabilidades es pereza. Si estamos ocupando un puesto de trabajo, Dios desea más que todo honestidad, que seamos personas confiables en nuestras tareas por hacer, esto evitará excusas y malentendidos. En Proverbios 2:7 dice, “Él reserva la prosperidad para los rectos, es escudo para los que andan en integridad”.
Planificar, agendar y clasificar las tareas y asignarles fechas y tiempo son ideas para aprender a usar de manera efectiva nuestro tiempo en el trabajo. Personas especialistas en el área laboral recomiendan que si una tarea es mínima, es decir te lleva menos de tres minutos, entonces es mejor llevarlas a cabo en el momento, es un error dejar las tareas pequeñas acumularse, para esto necesitamos sabiduría y como Dios desea un buen desempeño en nuestros puestos, Él promete dárnosla de manera especial para que podemos lograrlo, Santiago 1:5, dice, “Pero si alguno de vosotros se ve falto de sabiduría, que la pida a Dios, el cual da a todos abundantemente y sin reproche, y le será dada”.
Descansar, con el fin de tener un buen uso del tiempo, rendimiento y estar motivada. Dormir bien y alimentarte bien son rutinas que te ayudarán a tener animo y así lograr un buen día de trabajo productivo. Dios en Su Palabra nos insta al descanso, necesitamos día a día recargar fuerzas, ser sabias en lo que concierne a nuestros cuidados, para así cumplir con nuestras responsabilidades. El tiempo de descanso diario, fuera de las cosas laborales es necesario, en Eclesiastés 3:1-8 leemos que hay tiempo para todo. Para todo lo que implique un trabajo, debe haber un tiempo de descanso.